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En un año 2002, en el que el vasco Txus Jaio,
se paseó con su Focus WRC, los pilotos que le seguían en las clasificación
hacían lo que podían, sin llegar a inquietarle, lo que llevaba a gente como
Iñaki Arbeláiz, a darlo todo para escalar el mayor número de posiciones
posibles, dentro del rally de Cantabria, siendo su esfuerzo solamente
recompensado con el quinto puesto final. Al menos, según nos muestra la foto
de Juanelo, se lo pasó bien con su Mitsubishi. |
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En un asfalto de lo más complicado en el tramo de Trones,
perteneciente al Rally de Cangas del 2005, Roberto Flórez puso a prueba sus
manos, en una trazada más típica de un tracción trasera que de un delantera,
pero el espectáculo manda y el barro, más. El del 206 no pudo terminar la
carrera, pero mientras estuvo en competición demostró sus buenas maneras al
volante del Peugeot. La foto se la trajo de la localidad canguesa, Omar. |
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Cuando se le habla a alguien de Israel Velázquez
y su WV Polo, no vienen imágenes de él en lo más alto del podio, sino, más
bien entrando de costado cualquiera de las curvas que pueden componer un
tramo. Comenzó con el Polo Fase I y con este II, hace las delicias de los
presentes, como ocurrió en el rally de Tineo del 2006, donde dejó constancia
de su espectacularidad ante la cámara de Noe de Ortiguera. Al final
clasificó el 53. |
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Dentro de un Slalom, hay dos
tipos de participante, el que va a por los tiempos y el que se lo toma a
modo de divertimento. El caso de Yucas en el de Arroes del 2006, fue el
segundo, ya que entremezclando trompos, cruzadas y trazadas imposibles,
estuvo en la meta, pero dejando en la retina de los aficionados cruzadas
como la que nos trae Hugo, del piloto de Occidente. |
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El desplazarse a una prueba del Nacional, siempre lleva consigo la ilusión
de ver a los mejores pilotos del país con los mejores coches batiéndose el
cobre entre sí. Pero suelen quedarse fuera muchos buenos pilotos que, por
una u otra circunstancia, no verifican dentro del Campeonato. Por suerte, en
el Rally de Ferrol del 2006, Jesús Ferreiro, pudo salir de doble cero para
el deleite de los presentes, que recibieron con más emoción si cabe, las
cruzadas del fiero piloto gallego a bordo de su MKII. Uno de los afortunados
asistentes fue Rober de Trevías, autor de ésta secuencia. |