Cuando uno se pone delante del ordenador una semana de estas que descansan la mayor parte de las disciplinas del motor, ansía encontrar rumores, noticias, cosas al fin y al cabo que llenen ese vacío, pero cuando se topa con sucesos como el fallecimiento de uno de los pilotos más queridos de finales de los 80, principios de los 90, le dan ganas de estar sumido en una profunda desinformación. El caso es que a los 47 años nos deja Pep Bassas, un gran mago del volante, que tras una larga y penosa enfermedad, tiene que abandonar en la carrera más importante de su vida. Para el aficionado en general es un duro palo y para un acérrimo admirador suyo como un servidor, se va también esa esperanza que siempre se tiene de volver a ver a uno de tus ídolos, dando volante con los siempre impresionantes M3 E30, que tantas horas de sueño han quitado al amante de los traseras. Aunque se cansa pronto uno de estas cosas, valga como nuestro pequeño homenaje particular, la presentación del álbum 139, D.E.P.

Esperamos que os guste.

		La Subida Villa de Pravia en alguna edición, amplió su recorrido en unos metros para incorporar antes de la habitual salida, un tramo urbano con una amplia curva de izquierdas que en ocasiones como la del año 2005, se convirtió en uno de los puntos más interesantes de la carrera, a pesar de  no llegar a gran velocidad los participantes. Ayudada además por la lluvia, la curva dejó imágenes como la de Gonza, en la que vemos el Opel Corsa ex-David Palacio en manos de Raúl Sánchez, en pleno derrape en busca de un buen puesto en el apartado Junior. En él, Marrón era el más rápido aunque una exclusión lo dejaba fuera, heredando la Victoria Rodrigo Beteta por delante de Yucas, que con dos ascensos muy buenos, consiguió preceder a nuestro protagonista. La lluvia caída a mitad de manga, hizo que el mejor tiempo fuese para Mota, secundado por Otero con los GT Turbo y sólo la pericia de Iván Suárez y Chemari Castro, primero y segundo en la final, consiguió desbancar a los carrozados para colocarlos tercero y cuarto, cerrando los cinco primeros Alberto Redondo con el Saxo.
		No hay mejor denominación para los actos del motor que se celebran anualmente en Turón, que la palabra Fiesta. Sin lucha contra el crono, el slalom que se realiza en las rampas de Tablao, cuenta con todos los ingredientes necesarios para contentar a pilotos y aficionados. En gran medida, un trazado vistoso y unos pilotos con ganas de volante, a bordo de vehículos que en muchas ocasiones llevan parados desde la temporada anterior, hacen de esta prueba una de las más esperadas a lo largo del año. La edición a la que pertenece la foto de Omar, se celebró en el año 2005 y coincidió con una de las nevadas que taparon Asturias en aquellas fechas. En la salida, gente como Iván Suárez, Tano y Viti Pardeiro con los CM o Mota, Chemari y Sergio Díaz con sus carrozados, no iban a desaprovechar la ocasión de brindar a la afición sus mejores trucos malabares. Tras la colección de trompos que realizó Chemari Castro con el Sierra o Mota con un coche similar cedido por Caldevilla Motor, llegaba el turno de los CM, entre los que salía un debutante, Roberto Fueyo, que en la segunda de las pasadas hacía un recto trabando ruedas y se iba de frente contra las vallas y la gente, por suerte sin consecuencias más graves que protagonizar una de nuestras fotos.
		Siempre que uno cambia de provincia se encuentra inmerso en nuevos ambientes y costumbres que, en ocasiones, sorprenden por su bondad y en otras por todo lo contrario. En uno de nuestros viajes a la capital, nos fuimos al sur para ver las evoluciones de los pilotos del Regional Madrileño y por un lado nos quedamos defraudados por al poca inscripción y por otro, por el poco público presente en la prueba. La foto que nos trae Hugo, está sacada en el Rallysprint de Sevilla La Nueva y más concretamente en el salto que hay en la localidad de Navalcarnero, en la edición del 2006. El protagonista de la imagen es Juan Carlos Aguado, que vuela acompañado por José Martos, en busca de la Victoria que al final se llevó, por delante de Pablo Castro y Sergio Manzano, en una carrera en la que sólo terminaron quince participantes, luego de que la Guardia Civil impidiese salir a varios pilotos por no tener sus monturas los papeles en regla, provocando ausencias forzosas de gente puntera.
		Sin duda, el Recordman de Campeonatos de Asturias de Montaña, responde al nombre de Jose Ramón Fernández "Monchu", consiguiendo su amplio palmarés a base de derrotar a generaciones y generaciones de buenos pilotos, siempre a bordo de monoplazas. La foto que nos presenta en éste álbum Rober de Trevías, está sacada en la Subida a Castrillón del año 2006, en el que nuestro protagonista conseguía la docena de Campeonatos ganados. En entrenos, Tano marcaba el ritmo por delante de Iván, mientras Monchu se reservaba para la Oficiales, ganando ya la primera con Iván como segundo y Tano como tercero, arrancando éste una rueda en meta y teniendo que abandonar a pesar de acabar la ascensión. Monchu mejoraba su tiempo en la segunda, secundándole Iván y Chemari, para llegar así de vuelta a Castrillón, con lo que el Campeonato era para el piloto mierense. En carrozados, Puig sorprendía a todos con unos tiempazos que le colocaban como ganador, dejando el segundo y tercer puesto para Bulnes y Mota respectivamente, luego de que Naredo tuviese que abandonar tras la primera Oficial, en la había sido segundo. En la foto, el Fórmula de Monchu completa la primera de las horquillas con la cruzada justa para no perder tiempo y dar espectáculo a la vez.

- LA SECUENCIA -
La mayor parte de los hijos de pilotos de renombre, intentan seguir los pasos de sus progenitores, en ocasiones con actuaciones de relevancia como Ander Vilariño, Colin McRae, etc y en otros con más pena que gloria, como por ejemplo nuestro protagonista. Estamos hablando de Matthew Wilson, hijo del patrón de Ford, que a bordo del Focus WRC de su equipo satélite, Stobart, intentó en cantidad de ocasiones emular a su padre Malcom, aunque sin mucha suerte. Es cierto que tiene el don de la juventud, pero ese se pierde con los años. Acompañado por Michael Orr, le vemos en una secuencia de fotos de Daviz, realizada en el Rallye de Portugal 2007, en pleno derrape mientras intentaba entrar entre los diez primeros de la general. En carrera sólo pudo con McHale de los pilotos en coches del óvalo y tras la sanción a todos los vehículos de la marca por el espesor de las lunas, se tuvo que conformar con el duodécimo puesto, a la vez que Loeb ganaba y Peter Solberg le secundaba siendo mejor que Sordo, beneficiados éstos dos por el retraso de Gronholm, que era relegado al cuarto puesto y perdía unos puntos vitales en la general del Campeonato.

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